Confieso que no soy un lector asiduo, pero cuando una lectura me impacta, la puedo leer varias veces. Recientemente volvi a leer el libro "LA PARADOJA", de James Hunter, la perspectiva que tuve es diferente, dada las funciones que actualmente ejecuto, a la que tuve hace unos 6 años atras, cuando lo lei por primera vez. Comparto a continuación, algunos tips de interes del referido libro:
El “Liderazgo” es el arte de influir sobre
la gente para que trabaje con entusiasmo en la consecución de objetivos en pro
del bien común.
El “Poder” es la capacidad de forzar o
coaccionar a alguien, para que éste, aunque preferiría no hacerla, haga tu
voluntad debido a tu posición o fuerza.
La “Autoridad” es el arte de conseguir que
la gente haga voluntariamente lo que tú quieres debido a tu influencia
personal.
La clave del liderazgo es llevar a cabo las tareas asignadas fomentando las
relaciones humanas, construyendo relaciones que funcionen con todos los
integrantes de las distintas organizaciones. Y vamos a lograrlo si somos
capaces de satisfacer las necesidades legítimas de nuestros clientes, y si
somos dignos de confianza de esas personas. Y esta última llega cuando uno se
la merece,
El papel del líder es que su vida signifique realmente algo en la vida de
los otros. Cuanto más sepa influenciar, más seguidores tendrá, aumentará su
autoridad, sus ideas serán cada vez aún más apoyadas y así significará algo
para más cantidad de personas. Si eso es lo que buscamos al querer ser líderes,
al dar lo mejor de nosotros y crecer, obtendremos también más recompensas. Una
de ellas es la recompensa del gozo. El gozo tiene que ver con la satisfacción
interior y con la convicción de estar siguiendo los principios correctos de la
vida. Servir a los otros elimina el egoísmo que nos impide gozar de la vida. Y
el egoísmo permanece mientras uno no haya crecido emocionalmente. El gozo de
Jesús era que sus discípulos aprendieran a amarse los unos a los otros tanto
como Él los había amado a ellos. El amar y buscar satisfacer las necesidades
legítimas de los otros nos obliga a no ser egocéntricos y así nos permite
crecer.
Recopilado por Jorge Cortez